El método clásico para mantener las moscas lejos de las vacas es usar insecticidas, pero esta es una opción tóxica y costosa. En Japón, los investigadores han encontrado una extraña pero efectiva forma de repeler las moscas que no requiere ningún tipo de pesticidas: pintar las vacas con rayas de cebra.
Las rayas perturban a las moscas
Según un estudio publicado en octubre pasado en PLOS ONE, cuando los investigadores japoneses pintaron rayas de cebra en las vacas, las moscas las molestaron la mitad que las vacas sin rayas. La idea es que las rayas pueden, en efecto, perturbar los sistemas de detección de movimiento de los insectos que controlan si las moscas se acercan o aterrizan sobre el animal rayado.
Para este estudio, los investigadores pintaron seis vacas japonesas negras con rayas blancas y negras, y luego observaron las vacas con y sin rayas pintadas durante tres días. Los investigadores tomaron fotos de alta resolución del ganado en diferentes momentos para contar el número de insectos que atacaron a las vacas. También observaron a las vacas para ver si se golpeaban las patas, movían la cola y tenían otros comportamientos físicos comunes para repeler las moscas.
50% menos picaduras de insectos en las vacas cebra
Los investigadores continuaron observando vacas rayadas para ver si los componentes de la pintura repelían realmente a las moscas. Los resultados del estudio mostraron que el número de moscas observadas en las vacas rayadas era un 50% menor que en las vacas sin pintar. También encontraron que esta disminución coincidió con una reducción de los comportamientos defensivos en las vacas.
Actualmente, la industria ganadera utiliza insecticidas en el ganado para controlar las moscas, pero esta investigación puede demostrar que existe una alternativa menos tóxica, y quizás menos costosa, al uso de productos químicos. « Este trabajo ofrece una alternativa al uso de plaguicidas convencionales para mitigar los ataques de las moscas mordedoras al ganado, lo que mejora el bienestar de los animales y la salud humana, además de ayudar a abordar el problema de la resistencia a los plaguicidas en el medio ambiente », dice el estudio.